Este domingo, día 28, los cristianos iniciamos el tiempo litúrgico de Adviento (Adventus Redemptoris, 'venida del Redentor "). Cuatro semanas para preparar la celebración de la Navidad. El Dios cercano que se encarna, que se hace hombre.
El Adviento es camino, que es preciso recorrer, sabiendo que lo importante es la meta, la Navidad.
Al caminar, podemos hacerlo solos y con los ojos en el suelo, esta acción nos limita el disfrute de lo que nos rodea y la riqueza que supone el acompañamiento. Por lo contrario, cuando caminamos con la cabeza erguida y compartiendo el camino, esto nos enriquece, disfrutamos de la naturaleza y de la compañía.
El Adviento, es camino que hacemos con todos los cristianos con ansias de conversión, de cambio; manteniendo la esperanza, pues, de lo contrario, cuando se apaga la esperanza, se apaga también la vida. La persona ya no cree, no busca, no lucha.... se empequeñece, se hunde, se deja llevar por los acontecimientos. Hemos de cuidar las pequeñas esperanzas, que se van cumpliendo o frustrando. Pero el ser humano necesita una esperanza radical, que nos pueda sostener cuando toda otra esperanza se hunde, la esperanza en Dios.
"La noche está muy avanzada, y el día está cerca. Despojémonos, pues, de las obras de las tinieblas y vistámonos con las armas de la luz" (Rom.13, 12)
¡¡¡Santa María de la Esperanza, ruega por nosotros!!!
Comments